El día de Año Nuevo, después de
la visita de René y Karen y de comer en el lugar de la acampada en la capital,
tomamos rumbo a San Felipe a fin de seguir un recorrido paralelo a la autopista
de peaje que recorre el país de sur a norte y que, además de monótona, resulta
bastante cara. Este recorrido mayoritariamente realizado por pistas, nos llevó
a través de bonitos paisajes y recorridos llenos de aventura hasta las
proximidades de Coquimbo en la costa. Pasamos puentes estrechísimos y túneles
que en tiempos fueron para el ferrocarril y que con sus 3 metros de ancho, su
forma ovalada y una altura de 4 metros hicieron que fuera necesario rodar con
extremo cuidado de que nuestra carrocería no balanceara. Hasta llegar al último
en el que la vía no había sido eliminada ni recubierta y el rodar sobre las
traviesas hacía el paso muy peligroso para la integridad de los camiones. Fue
gracias a un lugareño y su hijo que con su pick-up nos ayudaron a buscar una
alternativa que descubrimos un paso por pista remontando la montaña que
atravesaba el túnel y que, a pesar de ser muy estrecha con pared a un lado y
precipicio al otro, en algo más de nueve kilómetros y tres cuartos de hora nos
puso al otro lado del propio túnel. A pesar de las dificultades todos
agradecimos un poco de acción tras muchos kilómetros de conducción monótona. En
el camino hicimos tres noches dos de las cuales fueron muy interesantes: la
primera en el jardín de una familia que se brindó a dejarnos entrar para pasar
la noche y con los que mantuvimos un agradable cambio de impresiones en el
pueblo de Putaende (así, como suena) y la segunda al lado de la pista en una
granja de cabras en la que también sus propietarios nos permitieron gentilmente
pernoctar. Estas peripecias para pasar la noche, se deben a que en Chile todo
es una propiedad privada y se hace muy difícil encontrar un sitio, no ya para
acampar, sino simplemente para detenerse a comer. Cada metro a los lados de las
carreteras está vallado sin dejar más de unos centímetros a modo de cuneta.
la visita de René y Karen y de comer en el lugar de la acampada en la capital,
tomamos rumbo a San Felipe a fin de seguir un recorrido paralelo a la autopista
de peaje que recorre el país de sur a norte y que, además de monótona, resulta
bastante cara. Este recorrido mayoritariamente realizado por pistas, nos llevó
a través de bonitos paisajes y recorridos llenos de aventura hasta las
proximidades de Coquimbo en la costa. Pasamos puentes estrechísimos y túneles
que en tiempos fueron para el ferrocarril y que con sus 3 metros de ancho, su
forma ovalada y una altura de 4 metros hicieron que fuera necesario rodar con
extremo cuidado de que nuestra carrocería no balanceara. Hasta llegar al último
en el que la vía no había sido eliminada ni recubierta y el rodar sobre las
traviesas hacía el paso muy peligroso para la integridad de los camiones. Fue
gracias a un lugareño y su hijo que con su pick-up nos ayudaron a buscar una
alternativa que descubrimos un paso por pista remontando la montaña que
atravesaba el túnel y que, a pesar de ser muy estrecha con pared a un lado y
precipicio al otro, en algo más de nueve kilómetros y tres cuartos de hora nos
puso al otro lado del propio túnel. A pesar de las dificultades todos
agradecimos un poco de acción tras muchos kilómetros de conducción monótona. En
el camino hicimos tres noches dos de las cuales fueron muy interesantes: la
primera en el jardín de una familia que se brindó a dejarnos entrar para pasar
la noche y con los que mantuvimos un agradable cambio de impresiones en el
pueblo de Putaende (así, como suena) y la segunda al lado de la pista en una
granja de cabras en la que también sus propietarios nos permitieron gentilmente
pernoctar. Estas peripecias para pasar la noche, se deben a que en Chile todo
es una propiedad privada y se hace muy difícil encontrar un sitio, no ya para
acampar, sino simplemente para detenerse a comer. Cada metro a los lados de las
carreteras está vallado sin dejar más de unos centímetros a modo de cuneta.
En las proximidades de Coquimbo y
La Serena, en el pueblo llamado Guanaqueros,
reservamos la cena de fin de año en un restaurante situado en el pequeño puerto pesquero de la localidad con
cotillón y fuegos artificiales incluidos.
La Serena, en el pueblo llamado Guanaqueros,
reservamos la cena de fin de año en un restaurante situado en el pequeño puerto pesquero de la localidad con
cotillón y fuegos artificiales incluidos.
Acampamos en una urbanización
privada al lado del pueblo por gentileza de una familia francesa que reside
aquí y que han sido muy acogedores con nosotros.
privada al lado del pueblo por gentileza de una familia francesa que reside
aquí y que han sido muy acogedores con nosotros.
Varias imágenes tomadas durante la ruta. A pesar de las advertencias pasamos todos los túneles menos el último que, al tener alternativa y las vías del antiguo tren al descubierto, decidimos salvarlo por una pista que pasaba un respetable puerto.
¡ Hola pareja de dos !
Antes que nada , Felices fiestas , que ya veo , que lo habéis celebrado , y mejor año 2014 , sin olvidarnos , de los Reyes , si es que llegan hasta allí .
Bueno ¿ ha llegado ya el Atego ? Supongo qué será traccionado . Estaréis deseando que llegue la etapa del Dakar , ¡ Qué envidiaaaaaaa ! , a ver si veo el MAN , por la Tele , para que me joda más ; lo sigo a diario , y además de la carrera , ¡ Qué paisajes ! , bueno voy a cambiar de tema . . .
He pensado más de una vez , la marcheta que lleváis , creía que os lo tomaríais , con más calma , peroooo , claro , si queríais ver el Rally , normal .
Pues por aquí , unas Navidades , muy tradicionales , y completas , por diversas razones , que ni los más viejos del lugar , recordaban . Ahora , a seguir con el CARNETA , pues ya aprobé dos exámenes pero me falta el de circulación , que me parece el más fácil , veremos . . .
El MAN , ya tiene la carroza puesta , completa : con el Caracol , el sarcófago , cajones con 300 Lts de agua y cualquier cantidad de material de ayuda , con todo , no pasara de 9 tn , aunque le falta , lo principal , RUEDAS , seguimos diseñando , bueno ayudando al Superalfredo , en la sustitución de la gemela , por sencilla en 20" , pues aumenta mucho el ancho de vía , y , problema , para legalizar . Al final , igual tengo que vender el MAN , P'A hacerme una súper célula , al TOYOTA .
Bueno pues , eso , que el asunto del trabajo , sigue igual , no se hasta cuándo .
Bonitas fotos , espero más del Rally y suerte en todo . Abrazos