Las especiales circunstancias de los tiempos que corren, nos tienen permanentemente en un estado de indecisión que ya empieza a ser difícil de gestionar.
Tenemos dudas en este momento sobre la conveniencia de seguir nuestro primitivo plan y dejar unos meses el camión en Nueva York (el almacenamiento lo tenemos bien resuelto) y tras viajar por un corto tiempo a España, retomar nuestro viaje para cumplir el objetivo previsto de conocer Alaska y Canadá o, a la vista del pertinaz cierre de frontera ente EE.UU. y Canadá, las dificultades que el propio EE.UU. está poniendo a los viajes desde Europa y los problemas que la obtención del visado de Canadá presentan para Magy, repatriar el camión desde Baltimore y dar por finalizada (tristemente) nuestra etapa americana del viaje.
En la zona en la que estamos actualmente, la decisión es importante, ya que dependiendo de ella se podrían plantear dos rutas: la primera hacia el norte para visitar Yellowstone y otros parques y enclaves de la zona, pasando por Niágara y Nueva York hasta llegar a Baltimore y finalizar el viaje, con lo que no llegaríamos a conocer los enclaves del sur que teníamos previstos y una segunda por el sur hasta Nueva York para seguir el plan original. Si este plan fuera posible por fin, en la continuación del viaje al volver de España, recorreríamos el norte hacia Alaska y Canadá, pero si la posibilidad de continuar siguiera como ahora, sería necesario dar por finalizado el viaje sin las visitas del norte de EE.UU. ni Alaska y Canadá.
Finalmente hemos decidido que esta última opción tiene más posibilidades y por ello lo haremos así. Ya hemos pasado el “punto de no retorno” y estamos cruzando Nuevo México y Texas con dirección a Nueva Orleans.
En este camino, hemos visitado ciudades con marcadas reminiscencias españolas, no solamente por nombre, sino por estilo de construcciones, gran difusión del español como lengua y otras muchas características que las hacen para nosotros muy agradables.
Visitamos Durango, Albuquerque (originalmente Alburquerque) y Santa Fe.
Largos paseos por ellas nos acercaron a su historia y nos dejaron disfrutar de conjuntos perfectamente conservados que recuerdan mucho al país que los fundó.
En concreto Albuquerque fue fundada el 23 de abril de 1706 por Don Francisco Cuervo y Valdés del que una placa situada bajo su estatua nos dice textualmente “Illustrius son of the Province of Asturias. Spain”, es decir “Ilustre fiu del Principau d’Asturies, España.”
Hola Carlos, nos conocemos desde el barco de Grimaldi del ano 2013. Ahora he desubierto tu pagina web. Me gusta mucho que coninuabas tu sueno de viajar despus la muerte de Pilar. El mejor es que encontrabas Magy la mujer con la misma obsesiión de viajar. Esteis muy lechos, en E.E.U.U. a despecho de la pandemia, felicidades! Más allá un gran viaje con muchas aventuras positivas. Quizas podreis continuar la ruta hasta Canada y Alaska. Cosas cambian muy rapido. Mucha suerte Saludos desde Austria Irene y Kurt
Hola Irene y Kurt,
Un placer saber de vosotros. Realmente ha sido genial la aparición de Magy tras los triste sucesos con la enfermedad de Pilar. Seguimos nuestro viaje, pero con grandes dificultades en fronteras.
Seguramente decidamos regresar y esperar un poco a ver si todo mejora.
UN enorme abrazo.